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martes, 23 de enero de 2018

Rayados en Metamorfosis


En esta ocasión no tratare tema cancha, es sabido por todos, que el cuadro de Mohamed no tiene variantes, que tiene pocas cartas para descifrar parados e ideas del rival, en esta ocasión, me gustaría compartir como veo la metamorfosis de la afición y el mismo club que busca una nueva identidad cuando está ya venía con el ADN de la afición, de esa que vivía el futbol con respeto, pasión y alegría.

Yo recuerdo cuando era niño, cuando empecé a ser aficionado a la pandilla, una de las razones que me hizo inclinarme a sentir los colores albiazules fue su afición, que el equipo peleaba más torneos en la mediocridad que las esperanzas de levantar un título, en aquellos románticos tiempos de los noventas, donde el futbol se sentía, se vivía, se comía, no había redes sociales, no existía la injerencia de medios cargado hacia un equipo, salvo en los medios del centro del país, esos tiempos románticos, donde la grandeza de un equipo era sostenida por su afición.

Ahora vemos tiempos donde buscamos equipararnos a los grandes del mundo, puede servir de modo aspiracional compararte con ellos, sin embargo, compararte, o emular lo que hacen los grandes o sus aficiones, es una burda copia que carece de identidad, copiamos modas, canticos, hasta insultos, y el club, hace lo mismo, compra “influencers”, promociona una marca hasta que te hartes y termines de aceptarla, pero lo que no “copia”, son los modelos de negocios, la forma de tratar a la afición, la manera de traer lo mejor de lo mejor posible con los recursos que se cuentan.

Ahora, hay personas que sin saber quién les da la autoridad, te dicen cómo comportarte, como expresarte, y como vivir la pasión por la pandilla, no es malo abuchear a un jugador, no es malo abuchear a un equipo completo, así como tampoco lo es, apoyar incondicional, gritar en las buenas y en las malas, aplaudir al ganador y enaltecer al caído, hay una delgada línea entre solo exigir por exigir y exigir para mejorar.

El ser humano como tal, no acepta críticas, y como mexicanos que somos, solo nos interesa el resultado, no tenemos capacidad de análisis, de ver contextos y hechos, nos nublamos solo con el resultadismo, por más efímero que sea, y lo mismo es con la afición, esta metamorfosis de que solo ver el resultado, y exigir sin dar ideas para mejorar, quizás y lo más seguro que muchas voces que buscamos exigir para mejorar sean apagadas por los que “dictan” las formas de comportarse, y con souvenirs del club apaguen a los que en algún momento intentaron cambiar la mentalidad de la afición.


La afición de rayados desde el 2003 comenzó a fracturarse, empezó a tener bandos, y eso ha sido más perjudicial, ya que la dirigencia solo busca mantener el consumismo extremo, que han logrado con esos “influencers” que solo han ido desuniendo a una afición que era más grande que el equipo mismo, y ahora es solo un reflejo del mismo, sin ideas, ni ganas de cambiar la forma de jugar para exigir para mejorar, que a final de cuentas, el aficionado de maneras directas e indirectas, es el que genera los recursos para el club.

@tecno82

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