Se terminó un torneo más, donde el resultado no reflejo lo mostrado en el camino, donde la némesis fue superior en los dos juegos, donde fue a festejar a nuestra casa, donde se hizo histórico por muchos factores, así termina un capítulo más de la historia de la pandilla, que quedará marcado por perder una segunda final en su flamante casa, donde quedo la sensación que se pudo hacer más.
Podemos sacar muchas conclusiones en esta derrota y el porqué de esta, sin embargo, hay uno solo que no se ha podido erradicar, es algo inherente en el ADN rayado, y es simplemente la presión, Rayados es un equipo que no sabe jugar con presión, le duele ser favorito, le incomoda tener todo a su favor para solo tomar el resultado, han sido muchos episodios, donde hemos visto que sus jugadores caen por este síntoma, desaparecen, fallan, y aunque haya mensajes desde la banca, no son suficientes para levantar anímicamente a un equipo que se cae fácilmente.
Podemos enumerar las situaciones claves de este encuentro, aunque en realidad es solo intentar ablandar el fracaso solo en 3 jugadores, que si bien, son una parte fundamental del equipo, no lo es todo, juegan 11 más 3 de cambio, los mensajes de la banca también son una falla importante, el no poder descifrar como motivar es peor que no ver lo que tu rival hace en el juego.
Ahora Rayados, debe de tomar decisiones duras, aunque el mercado invernal
en nuestro futbol es una burla, deben de actuar rápido para poder conciliarse con la afición, que no deja de apoyar, de estar ahí, pero sin embargo se siente dolida, humillada y sin el cobijo de su club.
En mi opinión, Rayados debe de mantener al cuerpo técnico, la mayor parte del plantel, y realmente reforzar la banca con jugadores de peso, y sobre todo, algo que he estado insistiendo desde que comencé a escribir, un preparador mental, un equipo que es endeble mentalmente, cae en soberbia, en confianza mal entendida y sobre todo, no sabe asimilar los lapsos duros del juego.
Rayados murió ayer por relajarse desde el minuto 3, por no tener la fortaleza para finiquitar un juego que era altamente ganable, por sus yerros y su falta de mentalidad, hoy Rayados sigue siendo un equipo rico con resultados pobres, y eso no cambiara hasta que aprender a combinar lo físico con lo mental y con buenas incorporaciones.
@tecno82